TURISMO Y MEDIO AMBIENTE
El turismo como fenómeno de desplazamiento de un lugar de residencia
permanente a otro temporal, no solo es un movimiento de personas que implica
transporte, alojamiento y alimentación, sino es un fenómeno
social complejo, con múltiples facetas que involucran la esfera de
lo económico, lo social-cultural (utilización del tiempo libre)
y lo ambiental. Mediante el turismo se pretende satisfacer necesidades vitales,
culturales o deseos personales del diverso tipo. Es decir, en tanto practica
social, el turismo no está condicionado por un instinto biológico,
sino que depende de un sistema de valores colectivos dominantes que estructura
un conjunto de roles económicos y sociales orientados hacia el fin.
El turismo como actividad económica corresponde a una racionalidad
dominante y tiene como objetivo la generación de ganancia, por lo
que ha implicado un proceso constante de expropiación y explotación
de los recursos de las comunidades y países para beneficio de los
grandes capitales.
La búsqueda de un desarrollo sustentable ha llevado a que se revaloren
las formas tradicionales de producción y a que se generen nuevas
formas de organización productiva en casi todas las actividades económicas
y las practicas sociales.
También ha representado un proceso
acelerado de explotación y expropiación de los recursos naturales
y de las zonas que por su diversidad biológica y sus atractivos naturales